Si eres de los que realmente adora la cerveza, ¿por qué no hacerla tú mismo?
El fenómeno Homebrew ha llegado para quedarse, ocupa cocinas y garajes de todo el mundo, es todo un arte que te enganchará y que ahora está al alcance de todos gracias a los Kits de Elaboración de Cerveza Artesana que incluyen todo lo necesario para elaborar cerveza en casa.
Homebrew, o la producción de cerveza en casa, es una afición que se extiende y que sorprende a los amantes de la cerveza, así que te contamos un poco más sobre esta bebida creada esencialmente de cuatro ingredientes: malta, lúpulo, levadura y agua, y su proceso de elaboración.
Sobre los ingredientes en la producción de cerveza
Malta
El grano es malteado para utilizarlo en la producción de cerveza, dando como resultado el primer ingrediente base, la malta. La cebada malteada es el grano básico más común utilizado en la elaboración de cerveza, pero también prevalece el trigo, la avena o la espelta.
La malta será la encargada de suministrar el azúcar que consumirán las levaduras durante el proceso de fermentación y también aportará color a la cerveza.
También existe la posibilidad de usar extracto de malta, una forma más procesada del grano, como la utilizada en los Kits de Extracto, también disponibles para la elaboración casera con grandes resultados y menor tiempo de elaboración.
Lúpulo
El lúpulo es ese "condimento" de la cerveza que proporciona amargor, agrega sabor y/o aroma, y tiene propiedades antisépticas y bactereo-estáticas que reducen el riesgo de contaminación y aumenta el tiempo de conservación de la misma.
En comparación con la malta, el lúpulo se agrega en pequeñas cantidades a la cerveza.
Levadura
La levadura será la responsable de transformar los azúcares del mosto (la cerveza no fermentada aún) en CO2, alcohol y otros subproductos.
Agua
El agua supone más del 90% del volumen de la cerveza en la mayoría de los casos, por tanto, la elección del agua es esencial en el proceso de elaboración y también elemento diferenciador en la elaboración en distintas regiones y de estilos.
Un punto a destacar en este ingrediente, es la importancia del PH del agua, pues afectará a la mayor o menor producción de azúcares de la malta.
Sobre las etapas en la producción de cerveza
Malteado
Para poder usar las enzimas naturales de los cereales, se deja germinar el cereal remojándolo en agua, se seca con aire caliente y se tuesta para conseguir diferentes grados de color.
Cada malta otorga diferentes sabores y aromas, por ejemplo, caramelo, café, chocolate, etc. Se utiliza en la elaboración una combinación de malta base con maltas especiales que unida al tueste de las maltas es responsable del color que finalmente observamos en la cerveza.
Molturado
Con la ayuda de un molinillo se abre el grano sin romper la cáscara, de esta forma durante la maceración se podrá disolver el almidón alojado en el interior del grano con facilidad y conseguiremos que las enzimas se propaguen libremente por el empaste, degradando el almidón en azúcares simples.
Maceración
La maceración consiste en mezclar durante un tiempo determinado el agua y la malta en agua caliente, esta acción dará lugar a un mosto dulce formado por esos almidones de la malta convertidos en azúcares.
Lavado
Con la intención de conseguir el mayor rendimiento se debe lavar el grano para arrastrar los azúcares que retiene, rociándolo a modo de ducha. Si comprobamos con un densímetro que la densidad del mosto baja, significa que ya hemos aprovechado todos los azúcares del bagazo (el grano usado).
Hervido
El mosto se debe cocinar y durante la ebullición, se agregarán los lúpulos a la solución para dar el amargor, sabor y aroma deseado.
Enfriado
Después de cocinar, el mosto se enfría para poder inocular las levaduras sin riesgo a dañarlas.
Fermentación
Una vez que el mosto se enfría, se agrega la levadura y comienza la fermentación. Sólo cuando la cerveza esté completamente fermentada, estará lista para ser embotellada.
Embotellado
Una vez concluida la fermentación primaria, y antes de embotellar, añadiremos azúcar para que la levadura siga trabajando; entonces se embotella y se deja fermentar por segunda vez y madurar en un lugar oscuro y fresco. Acto seguido sólo quedará… ¡degustar nuestra cerveza artesana!
Tras este esquemático repaso por los ingredientes y el proceso de elaboración de cerveza artesana, si tienes ganas de más, ¡no lo dudes! ¡experimenta y prueba la elaboración propia! Con Cervezanía, es posible.