Desde Cervezanía, además de ofrecerte nuestros kits de elaboración de cerveza artesana, te damos las claves para que disfrutes al máximo de la cerveza, y entre ellas, la temperatura ocupa un lugar importante. ¿A qué temperatura debo beber mi cerveza?
Aunque cada vez se habla más sobre la bebida más querida por todos, muchos no prestan la suficiente atención a la temperatura ideal a la que debemos consumirla ¡y esto marca la diferencia!
Lo primero que debes saber es que, aunque normalmente la cerveza se bebe fría, no todos los tipos de cerveza deben conservarse y beberse a la misma temperatura.
La Cerveza Lager, o como todos la conocemos, la cerveza rubia, es la más común en el mundo y una de las bebidas más populares y consumidas.
Esta cerveza, en sus distintas variedades, debe encontrarse a una temperatura entre los 6 y los 8º en el momento en que la vas a beber.
Para la Cerveza negra, de un gusto más selecto debido a su mayor intensidad y fuerza, la temperatura de consumo debe ser superior.
Esto es debido a que es mucho más espesa y consistente que la cerveza lager, por lo que la temperatura debe oscilar entre los 8 y los 10 º centígrados (algunos tipos pueden sobrepasar los 10 º incluso) para poder saborearla plenamente.
Nuestra cerveza Debla negra, cultivada en el corazón de la campiña andaluza, cuenta con una alta fermentación y una maceración al fuego lento, a lo que se le suma su sabor con toques de café y regaliz.
La Cerveza Pale ale comparte características con la cerveza negra, pero quizá es la variedad menos conocida. En este caso, su temperatura a la hora de beberla debe ser superior, situándose en 12º centígrados la temperatura ideal para beberla.
La cerveza India Pale ale, de color dorado intenso y disponible en Cervezanía para elaborar tu propia cerveza artesanal, es una cerveza de tradición inglesa, característica por su espumosidad y su alto nivel de alcohol y de lúpulo, encontrando su origen en 1790.
Además de saber la temperatura recomendada para cada tipo de cerveza, nunca viene mal conocer otros consejos.
Por ejemplo, es preferible tomar la cerveza en jarra o copa, para así poder agarrarla por la base o el asa. Esto evita que el contacto de nuestra mano con la bebida la caliente.
Es recomendable, además, y a pesar de que nos encanta la cerveza helada, servirla en un vaso frío pero no congelado, porque éste último no permite la creación de la espuma ni la apreciación de la cerveza a través del recipiente.
Por último, un aspecto igualmente fundamental es que se sirva en un vaso o copa transparente, que permita apreciar el color y la textura de la cerveza.
Ya no tienes excusa para disfrutar al máximo de tu cerveza favorita, tomándola y elaborándola a tu gusto con los kits de cerveza artesana de Cervezanía. ¡Cerveceros, a disfrutar a la mejor temperatura! Y recuerda que si tienes alguna duda, siempre puedes dejarnos tus comentarios.